Navidad barroca: Nisi Dominus II
Sagrada Familia- Rafael |
Como pasa en muchos escritos bíblicos,
siempre afloran múltiples interpretaciones de su significado, provocado por el
lenguaje críptico del que en muchas ocasiones alardea. Pero también puede
influir, tal como denunciaba Lutero, el que dependa de traducciones ajenas para la
comprensión de su mensaje. Y, como no, en la corrupción que padecen los
mensajes repetidamente transmitidos y copiados.
Pues el caso es que no se ve que
case mucho el determinismo divino o providencia que traslucen los dos primeros
versos del salmo, y la loa a la familia del resto. Ya que no son pocos los que
se aventuran a dar su interpretación, con mayor o menor misticismo, yo te doy
la mía, quizá algo prosaica.
Creo que el autor quiere reflejar
lo vano que es perder el tiempo en preocuparse y luchar por los bienes
materiales, que estarían reflejados en el poco descansar, en construir una casa
como símbolo de riqueza, y en el afán de asegurar la posesión de la misma, pues
sólo lo que Dios quiere dar, es lo que al fin y al cabo uno obtiene. En cambio,
son las relaciones humanas las importantes, sobre todo aquellas que engrandecen
al pueblo de Dios, de las cuales la más importante es la prodigalidad en la
prole, como expresión máxima del amor.
La obra Nisi Dominus HWV 238 de Georg Frideric Händel proviene de la
que procuró, durante su estancia en Roma en 1707, promovido por uno de sus
patronos, el Cardenal Carlo Colonna, para la celebración de un festival en
honor a Nuestra Señora del Monte Carmelo. A pesar de su formación protestante,
esta música demuestra el magisterio de Haendel para componer una música de
intenso fervor contrarreformista.
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